Hace ya unos años, hice una entrada sobre éstas lesiones que se provocan en los pies, más concretamente en los dedos y que son una de las causas más frecuentes de visita al podólogo.
En la próxima entrada, hablaremos de las durezas en otras zonas del pie.
Dependiendo de la zona en la que se localice y el motivo, puede tomar un nombre u otro.
El
callo se forma por la reacción de la piel al roce continuo o al ser comprimida entre el
hueso y el zapato.
Para tratar cualquier tipo de callo, es conveniente la eliminación de la dureza por parte del podólogo, recurrir a las ortesis de silicona y la utilización de un zapato adecuado.
Para tratar cualquier tipo de callo, es conveniente la eliminación de la dureza por parte del podólogo, recurrir a las ortesis de silicona y la utilización de un zapato adecuado.
En algunos casos, la solución definitiva suele ser la cirugía.
¡¡NUNCA JAMÁS!! utilice callicidas, especialmente si la persona es DIABÉTICA o está tomando SINTROM.
-TIPOS DE CALLOS-
CALLO INFERFALÁNGICO DORSAL:
Se puede localizar en la cabeza de la primera falange (garra proximal); en la cabeza de la segunda falange (garra distal); o puede aparecer en las dos a la vez (garra total).
CALLO EN PULPEJO:
Suele ser muy doloroso y aparecen al caminar con los dedos engarrados, normalmente al tener el paciente una marcha inestable y con miedo a las caídas, inconscientemente tendemos a engarrar los dedos para tener más agarre al suelo. En otros casos se ve provocado por la garra que adquiere algún dedo por un motivo biomecánico. Produce hipersensibilidad en la zona.
CALLO INTERDIGITAL:
Producido
por excesiva presión entre los condilos de las falanges; o entre una falange y un metatarsiano, debido a un
calzado de puntera estrecha, opresión excesiva de la media, por artrosis
etc. También llamado ojo de gallo.
CALLO DORSAL DEL 5º DEDO O DEDO PEQUEÑO:
Es muy frecuente, debido a la supinación del antepie (volcar el pie hacia fuera); los dedos presionan unos sobre otros, oprimiendo el quinto dedo contra la parte externa de la pala del zapato. Otras veces una excesiva garra del dedo y una rotacion en varo del mismo.
HELOMA SUBUNGUEAL
Es la aparición de un callo doloroso bajo la lámina ungueal provocado por un exceso de presión causado por el calzado o por uñas engrosadas. A veces puede estar asociado a la existencia de una exóstosis subungueal que es la formación de una excrecencia ósea en la falange distal del dedo. La eliminación del callo bajo la uña se realiza fácilmente, desapareciendo el dolor de forma inmediata. CALLOS VASCULARES: Éstos pueden ser duros o blandos y en su interior suele aparecer algún vaso sanguineo. Se provocan también por una excesiva presión en la zona o por pellizco a causa del calzado. CALLOS NEURO-VASCULARES: Parecidos a los callos anteriores, pero en éste caso parte de tejido nervioso lleva hasta en heloma y provoca mucho dolor.Suelen ser muy sangrantes al limpiarlos, al igual que los callos vasculares. PREGUNTAS FRECUENTES: ¿Los callos son lo mismo que las durezas?
Todo
se refiere a lo mismo: un endurecimiento y engrosamiento de la piel en
un punto o zona determinada. Ocurre que a las durezas se le denomina cuando aparecen en una superficie más extensa como puede ser la planta del pie, bien en el antepie o el talón.
¿Es cierto que los callos tienen raiz y si se quita no vuelven a salir?
Los
callos no tienen raíces. Los callos tienen una causa mecánica, un roce
y / o presión excesivos contra el calzado o el suelo debido a
deformidades del pie o dedos, mal calzado, formas anómalas de apoyar el
pie en el suelo ... Sólo incidiendo en estas cuestiones podemos eliminar definitivamente un callo.
¿Los callos se operan para que no vuelvan a salir?
No.
Lo que operarmos son las posibles causas que provocan un callo:
desviaciones o
deformaciones de dedos, de huesos y articulaciones del pie. Dichas deformidades óseas sí se operan, es recomendable hacerlo, tanto para evitar la aparición de dicho callo como para frenar otras deformidades. Si es cierto que cuando operamos éstos casos, algunas veces se elimina parte de piel del heloma al no ser claro que lo que lo provoque sea una deformidad ósea. Ante cualquier duda, acuda a su podólogo. Benjamín Casado Mora Podólogo Experto en Patología del Miembro Inferior Responsable Podoactiva Toledo |